Luego del desabastecimiento se viene el aumento de los combustibles en todo el país
Este 31 de octubre venció el acuerdo de congelamiento. Las petroleras negocian con Sergio Massa una suba del 10%. Aún hay dudas sobre qué día de noviembre se aplicará.
“Los combustibles están atrasados un 40%, al menos” aseguró un estacionero de Río Gallegos a ASN. La fragilidad financiera del último eslabón en la cadena de comercialización está al rojo.
Mientras se resuelve la tormenta, absolutamente evitable, del desabastecimiento producido, principalmente, por la desidia de las autoridades del BCRA y del Ministerio de Economía, las petroleras presionan para lograr un aumento de precios que morigere la pérdida.
Como “aporte” para la confusión, la AFIP volvería a postergar el aumento del impuesto sobre los combustibles líquidos ICL y al de dióxido de carbono IDC por novena vez seguida, incrementando el nivel de retraso que presentan los precios en el surtidor.
Los precios de los combustibles aumentaron en el año alrededor de 60%, mientras que la inflación acumulada hasta octubre es del 120%. Durante el congelamiento impuesto antes de las PASO Sergio Massa les ofreció a la industria petrolera diferir los pagos de derecho de exportación (retenciones) hasta fines de marzo, para que les vendan a las refinadoras el barril de petróleo a USD 56, muy por debajo de los USD 85 al que cotizó (este martes) el barril de Brent de referencia para Argentina.
A pérdida
La crisis del desabastecimiento podría haberse evitado. Desde mucho antes que se produjera las petroleras habían advertido la situación y pidieron autorización para importar 10 barcos de combustibles. Si bien la compra tuvo el visto bueno, no así la liberación de las divisas para pagarla.
Mientras Sergio Massa bravuconeaba en la televisión, emplazando a las empresas, ya un par de días antes, con el faltante ya visible en los surtidores, se liberaron los dólares de “urgencia” para que los buques llegaran al país.
Hasta el momento hay llegado tres barcos de nafta y diesel y otros dos que se están terminando de descargar. Otros tres llegarían en los próximos días.
Ahora bien, cada buque cuesta, en promedio unos USD 45 millones, y transportan unos 50 millones de litros. Eso implica que, al tipo de dólar oficial mayorista ($350) cada litro de combustible, puesto en puerto, cuesta USD 0,90 o $315.
El precio promedio en surtidores es $356 (en CABA). Con esos $41 sobrantes se debe afrontar el gasto de transporte, distribución y el margen de ganancias para el estacionero. Claramente la ecuación es negativa.
Aumento
La inflación acumulada durante el período de congelamiento supera, largamente, el 25%. Se estimaba que la corrección en surtidores rondaría entre el 15% y el 20%. Pero el gobierno rechaza la idea, máxime cuando el balotaje está a la vuelta de la esquina.
Tras el encuentro de Flavia Royón con las empresas, para seguir de cerca el tema del desabastecimiento, se espera una nueva reunión, este miércoles. En ella estará Sergio Massa y sería para fijar el sendero de precios hasta fin de año. Pero algo está claro, no habría disposición del Gobierno a que la suba supere el 10%, como también queda en duda si se aplicará este mismo miércoles o lo estirarán hasta después del balotaje.