La CEPH propone incentivos fiscales y regulatorios para reactivar la producción convencional de hidrocarburos
La Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) advirtió sobre el acelerado declino de las cuencas maduras de petróleo y gas y propuso un Régimen de Reactivación de la Producción Convencional con beneficios fiscales, laborales y regulatorios. La iniciativa busca frenar la caída de la actividad, preservar empleos y garantizar el abastecimiento energético del país.
Un sector estratégico en retroceso
Aunque el crecimiento de Vaca Muerta impulsó el auge del no convencional, los yacimientos tradicionales aún representan una parte crucial del sistema energético argentino. En 2024, el 46% del crudo y el 37% del gas natural provinieron de producción convencional, que además concentra el 48% de las reservas de petróleo y el 29% de las de gas.
Sin embargo, el informe de la CEPH advierte un panorama crítico: altos costos operativos, precios de venta en caída, infraestructura subutilizada y una fuerte retracción de inversiones. Según el documento, el lifting cost promedio se ubica entre 35 y 45 dólares por barril, mientras que el precio de venta bajó a 62 dólares en 2025, reduciendo los márgenes de rentabilidad al mínimo.

Las medidas que propone la CEPH
Para revertir el declino, la Cámara propone un régimen permanente con estímulos de largo plazo. Entre las medidas más destacadas se incluyen:
- Reducción de regalías al 6% o esquema variable según rentabilidad.
- Eliminación de derechos de exportación y otros impuestos distorsivos.
- Estabilidad fiscal, cambiaria y normativa por 30 años.
- Deducción acelerada del Impuesto a las Ganancias para proyectos de recuperación mejorada (EOR).
- Régimen cambiario especial para exportaciones e inversiones.
- Exención de Ingresos Brutos por cinco años y tope del 3% en adelante.
- Digitalización de trámites mediante una Ventanilla Única con plazos de respuesta de 10 días.
Impacto fiscal y laboral
El documento advierte que la pérdida de actividad convencional podría generar un impacto severo sobre las finanzas provinciales. Solo en 2024, Chubut, Santa Cruz, Neuquén y Mendoza recaudaron más de 1.000 millones de dólares por regalías provenientes de estos yacimientos.
Además, el crudo convencional sigue siendo clave para el parque refinador nacional, y el gas extraído del sur del país resulta esencial para cubrir la demanda interna en los meses de mayor consumo.
Evitar el colapso y sostener el empleo
La CEPH alertó que, sin una intervención inmediata, muchas áreas podrían cerrar en el corto plazo, afectando miles de empleos directos e indirectos y generando conflictividad social en las regiones productoras.
Por eso, el nuevo régimen apunta a ordenar la transición entre lo convencional y lo no convencional, evitando la destrucción de capacidades técnicas y laborales instaladas.
Según la Cámara, el beneficio sería múltiple: las empresas recuperarían incentivos para invertir, las provincias mantendrían su recaudación, y el Estado nacional preservaría la balanza comercial energética y la estabilidad fiscal.
Fuente: Mejor Energía