“El golpe en Santa Cruz”: editorial de Oscar Muñoz en Noticias en la Red
Tras la destitución del presidente del TSJ, “puede pasar cualquier cosa, incluso que intenten echar al gobernador”.
*Por Oscar “Pipi” Muñoz
No hay nada más cierto, -en estos tiempos que vivimos en Santa Cruz -y sepan disculpar por la centralización en la provincia-, que la frase que empleaba muy a menudo el Teniente Gral Juan Domingo Peron “la única verdad es la realidad” adquiere una inusitada fuerza política.
El golpe de Estado que ha provocado el cristinismo y la campora en la justicia provincial, usando como detonador al más alto tribunal, es un claro patrón, que la capacidad de daño está intacta, no ha menguado, ni un ápice.
La próxima elección de medio término el domingo 26 de octubre, donde se elegirán tres diputados nacional, es la cortina de fondo, para asestar un golpe más y debilitar la gestión del gobierno actual de la provincia.
Santa Cruz ha sido saqueada, abusada y violentada, a través de una justicia maniquea, que fue corrompida desde el ejercicio del poder, utilizando la obra pública como fachada, realizada hasta el hartazgo, como demostró la justicia federal y la CSJN.
El golpe que se da en la Justicia de Santa Cruz, desnuda la perversa visión de reducir la realidad a una oposición básica y caprichosa entre lo bueno y lo malo, sin admitir matices o valores intermedios. Si los magistrados de la hermandad no lo ven, no existe. Solo será judiciable, lo que a ellos les parezca útil, para seguir con la religión que los entronizo en el poder judicial.
Después de este golpe del Tribunal Superior de Justicia, echando a su presidente, puede pasar cualquier cosa que se les antoje, – obvio que no es tan simple, pero esta misma justicia, convalido que se pudiera elegir al Gdor y vice por ley de lemas, cuando claramente la constitución en su artículos 114 dice que el gobernador y vice se eligen por simple pluralidad de sufragios, nunca alentando las colectoras, pero paso en Santa Cruz, hay que tener memoria. Y fue esta cámara de diputados, en contra del cristinismo y la campora, elimino la perversa ley de lemas.
Con lo cual, no es alocado, ni tampoco fruto de ninguna teoría conspirativa suponer que este TSJ, podría una mañana, desde la cumbre del oráculo donde habitan los vocales del tribunal, pretender destituir al gobernador, al vice gobernador, perseguir apresar a cualquiera que se oponga a sus designios divinos de la logia k. Me dan miedo.
Por eso el voto, el domingo 26 de octubre, tiene una relevancia fundamental, nadie dice en esta columna, que el gobierno provincial actual, sea un dejo de virtudes y que pueda anotar grandes logros, pero aquí lo que está en discusión, si se va a permitir otra vez usar la mecánica de la fuerza, del golpe institucional, para echar al gobernador actual e instituirse ellos nuevamente en el poder, que tanto extrañan.
Si el ciudadano de a pie, de Santa Cruz, realmente quiere salir de esta religión que alienta el golpe institucional a como dé lugar, tiene que votar y apoyar la institucionalidad. Tanto el poder ejecutivo, como la cámara de diputados de la provincia, guste más o guste menos, son electos por el voto popular, son la expresión pura de la representación popular en el gobierno, son dos de las bases para una democracia plena. Y Todo lo contrario es cuando un solo poder, se erige en mentor de la verdad, la justicia y la interpretación del funcionamiento del Gobierno de Santa Cruz.
Que Dios o en quienes ustedes crean, salven a la democracia en Santa Cruz, Muchas gracias.
