El oro alcanza valores históricos y reconfigura el escenario global de la minería
El oro superó los 4.000 dólares por onza en los primeros días de octubre, alcanzando su valor más alto en la historia. Impulsado por la demanda de refugio financiero y las tensiones geopolíticas internacionales, el metal dorado vuelve a ocupar un lugar central en la agenda económica y minera mundial.
Factores detrás del repunte histórico
Según datos de Reuters, el precio spot del oro trepó hasta los 4.050,24 dólares, con un aumento interanual superior al 50%, marcando uno de los mejores desempeños desde fines de la década de 1970. Los analistas explican esta escalada por la búsqueda de activos seguros frente a la inestabilidad global, las expectativas de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos, la debilidad del dólar y las compras sostenidas de bancos centrales.
En línea con este panorama, Goldman Sachs elevó su proyección del precio del metal a 4.900 dólares por onza para diciembre de 2026, frente a los 4.300 dólares estimados anteriormente, señalando que la tendencia alcista podría prolongarse durante los próximos años.
Impacto en la minería argentina
El nuevo escenario global revaloriza el papel de los proyectos auríferos de la región patagónica y andina, donde la minería del oro es un eje productivo clave. Operaciones como Cerro Vanguardia en Santa Cruz, Veladero en San Juan o Calcatreu en Río Negro vuelven a ganar protagonismo ante un contexto internacional favorable.
En particular, Calcatreu, actualmente en etapa de construcción y preparación operativa, ya cuenta con los permisos ambientales necesarios para avanzar hacia la producción. Este desarrollo lo posiciona como uno de los proyectos más relevantes del nuevo mapa aurífero argentino, con potencial para capitalizar la tendencia global.
Un escenario de oportunidades y desafíos
Pese al entusiasmo, los especialistas advierten que el impacto local aún es incierto. Factores como los costos operativos, la presión fiscal, los contratos vigentes y la situación política serán determinantes para medir los beneficios reales.
El repunte del oro coincide con una reconfiguración del mercado minero global, atravesado por la competencia entre metales preciosos y minerales estratégicos vinculados a la transición energética. En este contexto, los altos precios podrían atraer inversiones hacia América del Sur, siempre que los países productores mantengan reglas claras y estabilidad macroeconómica.
El oro, refugio ante la incertidumbre
A nivel mundial, el precio récord del oro refleja la creciente incertidumbre económica, marcada por conflictos internacionales, tensiones en los mercados financieros y una estrategia de los bancos centrales orientada a diversificar reservas fuera del dólar estadounidense.
En 2025, el metal precioso se consolida como el gran protagonista del escenario minero global, reconfigurando estrategias de inversión y devolviendo protagonismo a los países con potencial aurífero aún subdesarrollado.
Fuente: Energía 360
