Conflicto pesquero: para poder asistir al acto por Cristina, el SOMU abortó la negociación
La propuesta empresarial incluyó un esquema de salarios no remunerativos, revisión de convenio y un tipo de cambio a $825, pero fue rechazada por el gremio, que denunció una baja salarial encubierta. El gobierno convocó a una nueva audiencia para el 25 de junio.
La audiencia convocada este miércoles 18 de junio por la Secretaría de Trabajo de la Nación para destrabar el conflicto entre el sector pesquero congelador, las cámaras empresarias y el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) volvió a fracasar sin avances. La tensión escaló cuando el gremio se retiró abruptamente tras rechazar la propuesta presentada por los empresarios.
La propuesta: alivio fiscal, revisión de convenio y dólar a $825
La iniciativa de las cámaras, consensuada previamente con el Ministerio de Capital Humano, proponía:
- Liquidar el 70% del salario en concepto no remunerativo, para aliviar cargas patronales y mejorar el salario neto del trabajador.
- Actualización de básicos por IPC.
- Revisión integral del Convenio Colectivo de Trabajo.
- Aplicar un dólar de $825 para liquidación de salarios, lo que generó el rechazo frontal del SOMU.
Desde el gremio señalaron que ese tipo de cambio “implica una baja encubierta de salarios”, al reducir el ingreso real de los tripulantes sin modificar la estructura productiva. Si bien estaban dispuestos a debatir el esquema no remunerativo, calificaron de “ficticio” el valor propuesto y abandonaron la audiencia.

Malestar oficial y preocupación en las ciudades portuarias
Desde el gobierno nacional hubo señales de molestia. “Las cámaras accedieron a morigerar el impacto y no hubo apertura al diálogo por parte del gremio”, señalaron fuentes del Ministerio. La reunión también contó con la presencia de los intendentes Juan Raúl Martínez (Puerto Deseado) y Gustavo Sastre (Puerto Madryn), quienes se retiraron visiblemente preocupados.
“Puerto Deseado vive de la pesca. No podemos permitir más dilaciones”, reclamó Martínez, reflejando el impacto que la paralización tiene en las economías locales.
Parálisis, cortes de ruta y un mercado que no espera
Con la temporada en aguas nacionales aún sin comenzar, la flota detenida y cientos de trabajadores sin embarcar, el conflicto se profundiza. En Puerto Madryn ya se organizaron protestas y cortes de ruta, mientras las empresas analizan cómo continuar sin avances por la vía institucional.
La conciliación obligatoria vigente corre sus últimos días y podría afectar directamente a la flota merlucera congeladora si no se logra una solución.
El camarón ecuatoriano gana espacio en los mercados
El conflicto pesquero argentino se da en un contexto internacional competitivo. Mientras en Argentina la actividad permanece paralizada, en los mercados internacionales el langostino salvaje pierde lugar frente al camarón de cultivo ecuatoriano, que avanza en costos más bajos, mejor logística y mayor presencia en Europa y Estados Unidos.
“El negocio dejó de serlo hace rato”, reconocen fuentes del sector, señalando que la falta de acuerdos internos pone en riesgo la permanencia de Argentina como proveedor clave de langostino natural, justo cuando la competencia global avanza sin pausa.
Fuente: Pescare